CONSTRUCCIÓN DEL ÍNDICE DE ABANDONO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO UTILIZANDO LA TEORÍA DE LA RACIONALIDAD LIMITADA
LÍnea TemÁtica: Factores asociados al abandono. Tipos y perfiles de abandono

VASQUEZ VELASQUEZ, Johanna
GALLON GOMEZ, Santiago
MARIN RODRIGUEZ, Nini Johana
VELÁSQUEZ PALACIO, Melbin
Universidad de Antioquia,Universidad de Medellín y Universidad Nacional de Colombia – Colombia
[email protected]

Resumen: En este trabajo se estudia el abandono estudiantil universitario utilizando una teoría diferente a la tradicionalmente utilizada, teoría del suicidio, asumiendo la teoría de la racionalidad limitada propuesta por Kahneman y Tversky (1979) y Simon (1979) con el fin de entender porqué los estudiantes toman la decisión de abandonar. Para conocer si este proceso obedece a un problema de racionalidad limitada se creó instrumento/encuesta de percepción de riesgo de abandono con cinco ítems que evalúan los factores que, se han encontrado, determinan el abandono estudiantil universitario: factores económicos, académicos, individuales, institucionales y culturales. Cada uno de estos factores evalúa en una escala de tres niveles, siendo tres la peor situación y uno la mejor, por lo que se podrían estar generando 243 posibles niveles de abandono, de menor a mayor riesgo. Este instrumento se aplicó a dos grupos de estudiantes; unos de universidad pública y otros de universidad privada en la Ciudad de Medellín, Colombia. Para contrastar los resultados del cuestionario se pidió a cada estudiante que calificara su nivel de riesgo de abandono en una escala de 0 a 100, siendo 100 un abandono inminente. Finalmente, se presentaron a los estudiantes diferentes escenarios de riesgo de abandono con la particularidad de que cada uno representaba la misma probabilidad de abandono. A pesar de esta condición, los resultados muestran que los estudiantes perciben el riesgo de abandono de manera diferente y tal de decisión se presentaría con mayor frecuencia en algunos de ellos. Esto podría estar evidenciando que el abandono estudiantil obedece a un proceso de racionalidad limitada.

Descriptores o Palabras Clave: Abandono, Racionalidad Limitada y Riesgo.

Introducción

Dado que los recursos destinados a la permanencia de estudiantes en educación superior son escasos, debe elegirse la mejor forma de asignarlos. Esto permite reconocer que un instrumento que sirva para medir el riesgo de abandono, es un elemento fundamental para tomar tales decisiones. Así, para el desarrollo de una medida que cumpla con tal propósito, se propone en esta investigación la construcción del índice de abandono estudiantil universitario, utilizando la teoría de la racionalidad limitada como base conceptual y considerando los determinantes del abandono como soporte metodológico.

Aunque muchas aproximaciones conceptuales han surgido para explicar porqué un estudiante toma la decisión de abandonar sus estudios a lo largo de su ciclo académico (véase, por ejemplo, Tinto (1975), Bean (1980), Cabrera, et. al, (1993)y Spady (1970) no se ha evaluado si está decisión obedece a un proceso de decisión racional o a una toma de decisiones en ambientes difusos, donde la incertidumbre está presente y es dinámica.

Adicionalmente, los estudios empíricos consideran que el abandono es el resultado de la interacción de diferentes determinantes como lo mencionan entre otros autores Porto et al. (2001), Pascarella (1980), Cornwell (2002), Cameron y Taber (2001, 1999), DesJardins et al. (2001, 2002), Cameron y Heckman (1998), Booth y Satchell (1995), Häkkinen y Uusitalo (2003) y Willett y Singer (1991), Giovagnoli (2002) y Ruthaychonnee (2012). Los resultados de estos trabajos conllevan a la formulación de políticas de retención que, en muchos casos, terminan beneficiando a estudiantes que aún continúan estudiando. Por tal motivo, es necesario conocer si hay una correspondencia entre los determinantes del abandono con los determinantes del riesgo de abandonar.

En este sentido y dado que todos los estudiantes activos en una Institución de Educación Superior (IES) podrían considerarse como abandonares potenciales, es necesario establecer las valoraciones relativas que dichos estudiantes atribuyen a cada una de las dimensiones que se han encontrado como determinantes del abandono estudiantil.

De acuerdo con lo anterior, este documento se divide en cinco secciones. En la segunda, se presenta el marco conceptual y la definición de abandono asumida en este estudio. En la tercera se hace la descripción de la metodología utilizada en la construcción del Índice de Abandono (IA). En la cuarta, se presentan los resultados en dos fases; en la primera se describe a la población en términos de sus características generales y de la valoración individual en cada una de las dimensiones evaluadas y, en la segunda, se presentan los resultados del IA. Por último, se ofrecen algunas conclusiones y recomendaciones.

Se espera que esta investigación, de tipo experimental, pueda mejorarse y orientar la toma de decisiones en cuanto a la asignación de los recursos.

1. Marco Conceptual

Podría afirmarse que la teoría del suicidio de Durkheim (1897) ha sido tomada como base conceptual para el estudio del abandono estudiantil iniciado por Tinto (1975), y se usado el análisis costo-beneficio de la educación desde una perspectiva económica para su medición. En dichos estudios el fenómeno se abordó desde una perspectiva individual sin considerar aquellos factores exógenos que pudieran afectarla.

Posteriormente, la investigación relacionada con el abandono estudiantil se dividió en dos grandes corrientes: i) en estudios que apuntaban a la profundización teórica del problema a partir del análisis metodológico de sus determinantes, es decir del efecto a sus causas, y ii) en aquellos estudios interesados en encontrar la manera más robusta de medir sus determinantes y niveles de riesgo, es decir profundización metodológica. De la primera corriente se destaca el avance en el abandono en las dimensiones del tiempo y el espacio, la diferenciación entre abandono permanente y transitorio, las fases y niveles de riesgo de abandono, el impacto de los primeros cursos matriculados, y la interacción dinámica de sus constructos entre otros. De la segunda, se pasó de la evaluación económica a la aplicación de modelos de regresión con variable dependiente discreta tales como los modelos logit y probit con efectos fijos y aleatorios, modelos multinomiales, la aplicación de modelos de duración (también de supervivencia) y la tendencia hacia regresiones multinivel.

Sin embargo, de esta revisión surge un vacío teórico/conceptual que soporte el estudio del abandono estudiantil con teorías actuales; por esta razón esta investigación asume la teoría de la racionalidad limitada con el fin de entender porqué un estudiante toma la decisión de abandonar.

Esta teoría surge como una explicación alterna al concepto de utilidad esperada llevado a la ciencia económica por Von Neumann Morgenstern (1944). Bajo esta teoría se asume que todos los individuos son racionales y que su función es maximizar su utilidad por lo que sus decisiones y elecciones lo llevan a un nivel óptimo. Para 1979 los sicólogos Simon, y Kahneman y Tversky con la teoría de la racionalidad limitada, el primero, y con la teoría prospectiva, los segundos, enfocan su trabajo en el análisis de las preferencias individuales con el fin de responder a ¿cómo toman realmente las decisiones los individuos?, y no en ¿cómo deberían tomarse?. Estas teorías unidas a Heurística (Tversky y Kahneman, 1974), teoría de las elecciones aplazadas (Greenleaf y Lehmann, 1995; y Tversky y Shafir, 1992), y efectos de contexto y de tareas (Hsee, 1996), han permitido en los últimos años concluir que la percepción de un individuo en cuanto a diferentes escenarios de elección depende de variables y factores que hasta ese año no se habían tenido en cuenta y comienza a desarrollarse la teoría de la decisión. La ventaja de esta teoría es que las predicciones pueden ser probadas directamente por la observación.

De acuerdo con lo anterior y, al conjugar las definiciones dadas por Tinto (1982) y Giovagnoli (2002), se define para este estudio a la deserción como una situación a la que se enfrenta un estudiante cuando aspira y no logra concluir su proyecto educativo, considerándose como desertor a aquel individuo que siendo estudiante de una institución de educación superior no presenta actividad académica durante dos semestres académicos consecutivos, lo cual equivale a un año de inactividad académica.

En la siguiente tabla se presenta un resumen de algunos trabajos que han utilizado la teoría de racionalidad limitada en diferentes áreas. De esta revisión se nota la utilidad de este planteamiento para entender las decisiones tomadas en ambientes con incertidumbre, limitaciones de tiempo, económicas y de conocimiento del contexto.

Tabla 1: Revisión teórica de la racionalidad limitada y metodología utilizada para medirla

Autores Tema Resultados
Arai, Billot and Lanfranchi (2001) Tutorías La tutoría mejora la información sobre las capacidades de los candidatos
Bao et al (2012) Expectativas individuales e ingresos agregados Un modelo evolutivo de selección sencilla del aprendizaje individual explica las diferencias en los resultados agregados.
Contini and Morini (2007) Cambios de comportamie nto en el trabajo La racionalidad limitada sugiere que los individuos alcanzan objetivos "satisfactorios", con base en las condiciones que prevalecen en sus propios ambientes locales.
Diasakos (2008) Problemas de decisión individual Explican el porqué de las diferencias entre las elecciones observadas y prescritas suponiendo racionalidad varían entre agentes y problemas.
Fehr and Tyran (2008) Interacción estratégica Sugieren que hay dos tipos de racionalidad limitada: ilusión monetaria y anclaje, las cuales son fuerzas de comportamiento que inducen a una inercia nominal para el ajuste de precios.
Fiori (2005) Emociones Hay casos donde la intensa excitación emocional conducirá a un comportamiento óptimo, y otros donde conducirá a decisiones irracionales.
Kaufman (1999) Excitación emocional La excitación emocional es una fuente de racionalidad limitada.
Oprean et al (2011) Educación La racionalidad limitada es mucho más que una excusa para la toma de decisiones irracionales y se convierte en vital para la educación permanente, porque es una característica psicológica clave para dicha educación.
Pouget (2007) Mercado financiero Las instituciones financieras deberían ser diseñadas incluyendo características ergonómicas cognitivas que se ajusten a la naturaleza limitada de la racionalidad humana.
Yao and Li (2013) Mercados La racionalidad limitada tiene un impacto en el origen y estructura de la pérdida de aversión y optimismo en los mercados.

Fuente: elaboración propia.

2. Índice de Abandono

2.1. Encuesta

El índice de abandono se creó como una medida de resultado derivada de la revelación de preferencia y de niveles de riesgo por parte de los estudiantes activos en una Institución de Educación Superior (IES). Para esto se creó un cuestionario con cinco bloques de preguntas (ver apéndice) que permiten la estimación no solo del índice sino también la simulación de escenarios que permiten entender el proceso de toma de decisiones por parte de los estudiantes. Los bloques de preguntas se describen a continuación.

Bloque 1: indaga por la información socio/ demográfica de los estudiantes, como edad, género, estrato socioeconómico, estado civil, si trabaja o no, personas a cargo, auxilio económico, tipo de colegio, semestre actual y año de inicio.

Bloque 2: en este se pide a cada estudiante que señale la respuesta que mejor describa su situación el día de hoy en términos de cada una de las dimensiones que según la literatura determinan el abandono estudiantil, estas son: individual, institucional, económica, social/salud y académicas. En cada una de estas dimensiones a su vez se eligió la variable de mayor peso, así que en lo individual se preguntó por la orientación profesional previa, en lo institucional por la adaptación al ambiente institucional, en lo económico por la suficiencia de recursos, en lo social/salud por las condiciones que pudieran limitar su integración y en lo académico por la satisfacción con la carrera. Cada una de estas cinco dimensiones/variables se evalúa en una escala de 1 a 3, siendo 3 la peor situación y 1 la mejor. Así para cada estudiante se genera un código de cinco dígitos, el cual describe su situación actual. En total se tienen 35 = 243 posibles códigos, y a los cuales el índice de abandono asignará un peso de acuerdo a cada nivel de riesgo. Por ejemplo, el código 32113 significa que: el estudiante no recibió orientación profesional previa (3), ha tenido algunos problemas para adaptarse al ambiente institucional (2), no tienen dificultades económicas para estudiar (1), no tiene ningún problema social o de salud mental que afecte su desempeño académico (1) y no está satisfecho con la carrera (3).

Bloque 3: se pidió a cada uno de los encuestados que de acuerdo a las respuestas dadas en el bloque 2 señalara en una escala visual análoga de 0 a 100, cómo considera hoy su riesgo de abandono: siendo 0 ningún riesgo y 100 abandono inminente tanto para el programa actual como para la institución.

Bloque 4: en este se pidió a cada estudiante que señalara el nivel de riesgo actual que representa para él cada una de las dimensiones evaluadas en el Bloque 2. Este riego se señala en una escala visual análoga de 0 a 100, siendo 0 el nivel más bajo de riesgo de abandono. Este bloque se diseñó para identificar cuál de las dimensiones peor evaluadas en el Bloque 2 pesaría más en la decisión de abandonar.

Bloque 5: aquí se presentan a cada estudiante dos posibles situaciones a las que podrían enfrentarse dos semestres después, estos escenarios (A y B) representan dos códigos de los 243 posibles generados en el Bloque 2, con la particularidad de que cada escenario representa, en términos teóricos la misma probabilidad de abandono. Sin embargo, el estudiante evalúa cada escenario en una escala de 0 a 100, y le asigna el riesgo que según su percepción representa cada uno. Esto significa que si la toma de decisiones obedece a un proceso racional cada estudiante elegiría en mismo nivel de riesgo en cada escenario, en caso contrario, se concluiría que la racionalidad con la que se toman la decisiones es limitada y estos estudiantes en lugar de optimizar satisfacen (Khaneman and Twersky, 1979).

2.2. Metodología para la construcción del índice

De la literatura se conocen dos métodos para obtener medidas de utilidad a través de las preferencias de los individuos estos son: estándar gamble y time trade off (TTO) estos facilitan el proceso metodológico de agregar los resultados individuales a poblacionales en un momento de tiempo “point in time”, esto es tiempo discreto y se representa como:

Lo que significa que el índice de abandono para una población de estudiantes en un momento determinado es uno sobre el tamaño de la población multiplicado por la sumatoria del índice de abandono de los i-ésimos individuos en el momento j.

Ahora, si se tiene tiempo continuo/intervalo “period of time” se tendría t1 como tiempo inicial y t2 tiempo final, matemáticamente se representaría de la siguiente forma:

En este caso el índice de abandono alcanzado sería la sumatoria de la diferencia entre el momento inicial y el final para cada estudiante dentro del programa. La ventaja de este análisis sobre los demás tipos descansa en el hecho de que los resultados pueden ser medidos en múltiples dimensiones e incluir una medida de utilidad que refleje las preferencias de los estudiantes.

Así, se utilizó la técnica de regresión de Mínimos Cuadrados Generalizados (GLS) con efectos aleatorios y probando todos los supuestos asociados a este tipo de regresiones. La variable dependiente de la forma (1-P) donde P es la preferencia reportada por los estudiantes en los Bloques 3 y 5 de la encuesta aplicada. Las variables independientes fueron variables dummy para las cinco dimensiones del bloque 2 de la encuesta así: individual (ind) 1, 2 y 3, institucionales (ins) 1, 2 y 3, económicas (eco) 1, 2 y 3, social/salud (soc) 1, 2 y 3 y académicas (aca) 1, 2 y 3. Finalmente, se generaron tres variables adicionales, dos de ellas correspondientes a la interacción entre individuales y académicas (I2) y entre económicas y social) salud (I22) y una variable (D1) que mostraba por lo menos el valor de 3 en alguna de las cinco dimensiones evaluadas. El modelo estimado fue:

Los coeficientes de la regresión se convierten en los ponderadores que se utilizaron en la construcción del índice de abandono para cada estudiante y se agregan para el total de en cada uno de los grupos. Este índice de abandono se convierte en las utilidades generadas y en el insumo básico para calificar los códigos del Bloque 2 de la encuesta.

3. Resultados

3.1. Descripción general de la información

El estudio exploratorio se realizó entrevistado a 135 estudiantes de dos universidades de la ciudad de Medellín Colombia, una pública (52.59%) y una privada (47,41%) en cuatro programas de pregrado: Ingeniería financiera, Economía, Contaduría y Administración de Empresas, estos programas se eligieron porque históricamente han representado los mayores porcentajes de abandono estudiantil en las universidades. Entre estos grupos no se encontraron diferencias significativas por edad, sexo, estado civil, personas a cargo y el tiempo transcurrido entre la terminación del bachillerato y el inicio de la universidad (Tabla. 2). Se podría pensar además en una menor capacidad económica de los estudiantes de la universidad pública (UPu) debido a que el estrato socioeconómico es menor, reciben mayores subsidios institucionales y gubernamentales, el costo de la matricula es menor y un número más alto de estudiantes que trabajan. Además hay una correspondencia entre el tipo de colegio donde terminan el bachillerato y la universidad donde inician su formación profesional.

En cuanto al índice de abandono la evaluación de los determinantes arrojó un total de 51 códigos de 243 posibles estados. En cuanto a los factores individuales se encontró que el 59,38% de los estudiantes en la universidad privada recibieron algún tipo de orientación profesional y el 57,74% de los estudiantes en la universidad pública no la recibieron.

Tabla. 2: Características socio/demográficas

Variables Upu
n=75
Upr
n=64
p-valor
Edad 22±3,5 22±2 0,532
Estrato 2±0,8 3±1,12 <0,001
Tiempo para iniciar educación superior 2,12±2,25 1,67±1,35 0,081
Sexo Hombre 34 27 0,459
Mujer 36 37 0,459
Tipo de Colegio Público 55 19 <0,001*
Privado 16 45  
Estado Civil Casado 2 5  
Unión Libre 4 0 0,096
Separado 0 1  
Trabaja Si 29 16 0,051*
No 42 48  
Tiene personas a cargo? Si 6 4 0,626
No 65 60  
Recibe ingresos adicionales Si 42 22 0,004*
No 29 42  

Nota: UPu: Universidad Pública. UPr. Universidad Privada
Variables cuantitativas: se expresan como la media ± desviación estándar y el p-valor se halló por la prueba t-student. Las variables cualitativas se expresan en frecuencias y el p-valor se halló con la prueba Chi2.

Con respecto a las condiciones institucionales cerca del 70% de los estudiantes, en ambas universidades, afirma no haber tenido ningún problema para adaptarse al ambiente institucional. En lo económico se tienen que el 54,93% de los estudiantes en la UPu y el 54,68% en la universidad privada (UPr), afirman tener alguna dificultad económica, sin embargo el 5,63% en la UPu no continuaría por esta dificultad. En cuanto a la dimensión social y de salud (estrés, ansiedad, depresión, dificultad para socializar u otro malestar que afecte mis estudios) se encontró que esta es la única que presentó diferencias significativas entre los estudiantes de ambas universidades, donde el 62% de la UPu afirma tener alguna dificultad de este tipo que afecta su rendimiento académico en comparación con el 40,62% en la UPr. Finalmente se evaluó la dimensión académica más del 50% de los estudiantes afirma estar satisfecho con su carrera.

En cuanto a la evaluación del nivel de riesgo de abandono del programa se encontraron diferencias significativas entre la percepción de los estudiantes en ambas universidades presentando un nivel de riesgo mayor en la UPu con un nivel de riesgo máximo del 95%, una media de 24.74±26.68 (IC 95% de 18.430; 31.062) en contraste con la UPr donde el nivel de riesgo más alto reportado fue del 80% con una media de 12,468±19.327 (IC 95% 7.640; 17.296) p=0,001. Para el nivel de riesgo de abandono institucional reportado no se encontraron diferencias significativas entre los grupos de estudiantes donde el 80% de los estudiantes en la UPr calificó un riesgo menor del 45% y el mismo porcentaje en la UPu calificó como menor al 50%.

Ahora, la calificación del riesgo por dimensiones mostró en una ordenación de mayor a menor riesgo en la UPu la jerarquía social/salud, económica, institucional, individual y académica. En la UPr la ordenación fue: económica, institucional, académica, social/salud e individual. Estos resultados muestran que a pesar de las dificultades económicas de los estudiantes en la UPu el riesgo de abandonó no está determinado por esta situación. Sin embargo y aunque los estudiantes en la UPr afirmaron no tener dificultades económicas esta es la dimensión más sensible.

Finalmente y en cuanto a la evaluación de los resultados de los escenarios planteados se encontró que el 11.11% de los 135, evalúo el escenario A con el mismo nivel de riesgo que el B. El 18.51% considera que el Escenario A representa un mayor nivel de riesgo de abandono especialmente para los estudiantes de la UPr siendo el factor desencadenante del abandono las dificultades sociales y emocionales que han afectado el desempeño académico, siendo este factor el que mayor riesgo obtuvo en la jerarquía de dimensiones en la UPu. Para el 70.37% de los estudiantes el escenario B representa un riesgo mayor. En la dimensión económica es la que estaría afectando el abandono, esta calificación fue más frecuente en los estudiantes de la UPu, siendo este factor económico, la primera dimensión de riesgo de abandono en la UPr. Se encontró además que el código generado en la bloque 2 de la encuesta fue común al expuesto en el escenario A en tres estudiantes y al expuesto en el escenario B en un estudiante, pero la calificación otorgada no fue la misma.

3.2. Índice de Abandono (IA)

Después de probar con diversos modelos se encontró que el que mejor se ajustó a los datos fue aquel donde cada una de las dimensiones se consideró de manera independiente, en la Tabla 3 se muestra el valor del coeficiente (cof) , el p- valor (P>|t|) y el intervalo de confianza al 95% (IC 95%) del modelo estimado. El panel fue homocedastico y no se presentaron problemas de autocorrelación.

Tabla 3. GLS para el Índice de Abandono

Dimensiones Cof P>|t| IC 95%
Individuales (ind2) 0.033 <0.001 0.023; 0.043
Individuales (ind3) 0.139 <0.001 0.126; 0.151
Institucionales (ins2) 0.014 0.004 0.004; 0.023
Institucionales (ins3) 0.130 <0.001 0.109; 0.150
Económicas (eco2) 0.018 <0.001 0.009; 0.026
Económicas (eco3) 0.126 <0.001 0.104; 0.147
Social/Salud (soc2) 0.015 0.001 0.006; 0.024
Interacción (I2) 0.126 <0.001 0.107; 0.144
Interacción (I22) 0.100 <0.001 0.081; 0.117
Dl 0.015 0.072 -0.001; 0.032
Constante -0.003 0.037 -0.005; -0.000

Con los coeficientes de la estimación se generó el índice de abandono, el cual mostró diferencias significativas por diferencia de medias entre los estudiantes de ambos tipos de universidades 0.3548±0.1705 en la UPu y 0.3025±0.1533 en la UPr con p = 0.042. Este IA se dividió en quintiles de riesgo siendo el primero el de más bajo riesgo de abandono, en la Tabla 4 se muestran los quintiles, el IA generado y el código asociado a cada uno. Esto permitió contrastar los niveles de calificados en las dimensiones con la descripción en términos de riesgo que hace el IA calcula.

Tabla 4. IA por quintiles de Riesgo

Quintil Código IA   Quintil Código IA
  11111 0.059     21222 0.399
  11112 0.074     21232 0.497
  11121 0.059     22212 0.413
  11211 0.077     22221 0.398
1 11221 0.173     22222 0.494
  12111 0.073     23211 0.420
  21111 0.092   4 31113 0.407
  21121 0.189     31123 0.491
  31111 0.198     31212 0.411
  11312 0.284     32112 0.407
  12221 0.278     32122 0.499
  13121 0.273     32211 0.410
2 21112 0.204     33111 0.412
  21211 0.207     33121 0.496
  22111 0.203     21233 0.600
  31121 0.282     22322 0.606
  11223 0.383     31222 0.503
  12212 0.294     31322 0.604
  21122 0.295     32123 0.602
  21221 0.298     32212 0.517
3 31112 0.297   32213 0.619
  31122 0.394     32221 0.501
  31211 0.300     32222 0.603
  31221 0.396     32232 0.700
  32121 0.392     32233 0.803
          32311 0.506

Aunque el IA recoge la mayor variabilidad posible, se encontró que ciertas dimensiones mal calificadas por los estudiantes no están determinando la asignación del riesgo de abandono como es el caso de la orientación profesional previa.

4. Conclusiones

Los resultados del modelo permiten explorar condiciones de riesgo de abandono que contribuyen con el diseño de políticas orientadas a la retención estudiantil, sin embargo, las estrategias de intervención deben centrarse en aquellas variables que pueden ser afectadas y que aparecen como fuertes determinantes de las decisiones estudiantiles.

Es necesario resaltar la diferencia identificada entre el contexto público y privado, en la que se presenta una evaluación diferente de las condiciones que pueden favorecer el abandono universitario, permitiendo ello pensar en estrategias diferenciadoras relacionadas con los escenarios institucionales y socio-económicos.

Llama igualmente la atención en el proceso de toma de decisiones explorado, en el que se encuentra una mayor posibilidad de cambiar de carrera que de cambiar de institución. Esto sugiere referentes o imaginarios relacionados con las instituciones o con la educación superior, que le dan un lugar distinto al programa elegido, y a la orientación en la elección de un programa académico.

Si bien el procesamiento de información racional-emocional es afectado por creencias, expectativas, experiencias y conocimientos, el peso, lugar o representación que un individuo parece darle al proyecto de formación en una institución, tiene un lugar importante en la decisión de abandonarlo o no.

Explorar estas diferencias, y la importancia que se le puede dar en un momento determinado a una situación o condición que puede influir en la decisión de terminar los estudios, es fundamental si se quiere considerar el factor individual e intrínseco que hace que dos estudiantes ante un mismo evento tomen decisiones distintas.

Si bien la orientación vocacional ha sido considerada como un factor importante relacionado con el abandono (Ministerio de Educación, 2009) (Díaz Peralta, 2008) (Giovagnoli, 2002) (De Vries, Arenas, Romero Muñoz, & Hernández Saldaña, 2011) la población de este estudio no la percibe como un riesgo para abandonar. Es importante aclarar que generalmente la orientación vocacional ha sido indagada como el proceso de acompañamiento recibido para elegir estudios superiores, pero realmente la orientación vocacional se brinda durante toda la vida y debe hacer parte también de los procesos de formación educativa desde la infancia.

Tomar la decisión de abandonar o no en un escenario de riesgo posible, hace alusión a un proceso cognitivo complejo, que involucra lo emocional, lo psicobiológico, y del que se ocupan las neurociencias actualmente. (Damasio, 2001). En el entretejido neurobiológico en el que se inscriben vivencias, proyectos, sentidos de vida, y mediados por la habilidad y condición emocional que permite evaluar una situación y encontrar una alternativa, los estudiantes eligen permanecer o abandonar los estudios superioresLos resultados del modelo permiten diseñar políticas orientadas a la retención estudiantil, sin embargo, las estrategias de intervención deben centrarse en aquellas variables que pueden ser afectadas y que aparecen como fuertes determinantes de las decisiones estudiantiles..

Referencias

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Apéndice

Cuestionario de Percepción de Riesgo de Abandono en Estudiantes de Educación Superior

Nota: esta encuesta se aplica para estudiar los aspectos que influyen en el riesgo de abandono estudiantil universitario. La información suministrada es de carácter confidencial y no será utilizada para otros fines diferentes al estudio.