La Tenacidad y Perseverancia
CLAVES DE UN ÉXITO ESPERADO

Licda. Zyuín Zamora

Al llegar a la oficina del licenciado Cyril Joseph, Inmediatamente se percibe un ambiente de pulcritud y organización. Se caracteriza por la puntualidad, pues aunque la cita estaba pautada a las 8.00 a.m., llegué a las 7:10 a.m., y ya se encontraba esperando. Me hizo pasar y nos dispusimos a iniciar nuestra amena charla.

Este joven de 41 años, egresado de la carrera de licenciatura en Análisis de Sistemas, de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP), es la mente maestra detrás de los softwares i-Mereb y Smart Académico, sistemas que van orientados a aprovechar todos los beneficios que ofrece actualmente la Internet, para ofrecer un mejor servicio a padres de familia, estudiantes y la administración de un colegio. A través de esta solución los acudientes pueden conocer el desempeño escolar de sus hijos, sin esperar la llegada de la boleta de calificaciones.

Su histórica relación con los softwares inicia cuando estudiaba en la UTP y un compañero lo invita a desarrollar una solución académica que consistía en la realización de una aplicación para boletines de los colegios. En un comienzo se negó rotundamente pero, la persistencia de su amigo fue tal que lo llevó a realizarla.

Iniciaron como un grupo de trabajo en cual él era el encargado de la parte académica. La maduración del proyecto tomó tres años, donde al final solo él quedaba al frente del proyecto. El software quedó terminado y fue comprado por muchas escuelas de manera exitosa, lo que le permitió ver que había un nicho de mercado que tenía una necesidad y que él podía suplir. Allí nace la idea de tener su propia empresa.

Al inicio fue difícil, sólo tenía un computador prestado donde pasaba grandes horas programando. Para él no había carnavales, fiestas patrias, ningún día festivo era libre, todos esos momentos eran para programar e idear sistemas que le permitieran abrirse paso en el mercado. Al abrir su empresa y él mismo mercadearla, no fue tarea fácil, pero su "terquedad" como el mismo señala lo llevó a no claudicar jamás. Él era consciente de que muchos empresarios se sentían decepcionados con otros proveedores y pensaban que a él le sucedería igual.

Sin embargo, eso no fue obstáculo para que siguiera su lucha. Fueron varios años de persistencia, donde muchas veces los ingresos estaban simplemente en rojo. lncluso su familia ya le decia 'que dejara eso' pero su meta era hacer una empresa exitosa. Además, contaba con la experiencia de estudiar en la UTP, donde se le enseña que se puede hacer mucho con poco y maximizar cada recurso que se tiene a la mano.

Cuando empezó en su empresa él era el "todo": programador, cobrador, mercaderista, repartidor, mensajero.Fueron días en los que levantarse a las 3:00 a.m., para estar en algún lugar del interior del país y estar en horas de la tarde en la capital y seguir trabajando, era lo habitual.

Hoy, 17 años despúes, el Ingeniero Cyril Joseph ve coronado su sueño gracias a la perseverancia y la tenacidad que puso en cada día de trabajo. Se regocija al ver cómo su compañía, Bios Software, ubicada en el Tecno-Parque de la Ciudad del Saber, es una empresa 100% panameña con personal y capital nacional, que se dedica al diseño, desarrollo, asesoría e lmplementación de sistemas de información para el sector educativo de la República de Panamá. Además, cuenta con la implementación de los servidos de: consultoría, personalízación, soporte a hardware y software, capacitación, mantenimiento, migración de información, soporte on line y soporte de redes.

Actualmente, Joseph únicamente se dedica a administrar su empresa, la cual trabaja en la lnternacionalización de sus productos, especialmente para el mercado europeo, lo cual será de gran beneficio para Panamá, porque se verá que aquí "sí se desarrollan nuevas tecnologías" y se demostrará que en nuestro país hay personas con intelecto y una mente sabia para crear dividendos.

Ciryl Joseph no es sólo ese empresario detrás del computador, es un hombre felizmente casado como el mismo afirma, padre de dos niñas de 10 y 11 años. Su familia la disfruta ahora a plenitud, pues en estos momentos sólo se dedica a la administración, aunque su vocación aun sigue siendo la programación, en este nuevo rol puede disfrutar de fines de semana, días feriados y fiestas que antes dedicaba a hacer nuevos software.

La tenacidad, perseverancia y esfuerzo de Cyril Joseph, un egresado de esta Casa de Estudios Superiores, son la mayor prueba de que el camino al éxito no es fácil pero tampoco es difícil obtenerlo.